
¿Cómo demostrar el acoso laboral?
Sabemos que numerosos trabajadores enfrentan situaciones de acoso laboral, también conocido como mobbing, que pueden ser devastadoras tanto a nivel personal como profesional. Este tipo de comportamientos no solo afecta la salud mental y física del trabajador, sino que también crea un entorno de trabajo insostenible.
Desde nuestra experiencia como abogados laboralistas en Valencia, queremos explicarte de manera clara, pero rigurosa, cómo puedes demostrarlo y proteger tus derechos conforme a la normativa española.
¿Qué entiende la ley como acoso laboral?
El acoso laboral es una conducta sistemática y hostil dirigida hacia un trabajador con la intención de menoscabar su dignidad, socavar su posición en la empresa o provocar su salida de la misma. Estas conductas pueden incluir:
Insultos reiterados.
Aislamiento deliberado.
Sobrecarga de tareas inasumibles o, por el contrario, la privación de responsabilidades significativas.
El artículo 4.2.e del Estatuto de los Trabajadores garantiza el derecho a la dignidad en el trabajo, y el artículo 14 de la Constitución Española protege el derecho a no sufrir discriminación ni trato degradante.
Es importante entender que no toda situación desagradable en el trabajo se considera mobbing. Para demostrar acoso laboral, es necesario probar que estas conductas son reiteradas y tienen como fin menoscabar tu integridad personal o profesional.
Pruebas de acoso laboral
Demostrar el acoso laboral requiere evidencias sólidas y variadas que acrediten tanto los hechos como sus consecuencias.

Testimonios de testigos
El testimonio de compañeros, supervisores o cualquier persona que haya presenciado las conductas abusivas puede ser fundamental. Según el artículo 299 de la Ley de Enjuiciamiento Civil, las declaraciones de testigos son un medio probatorio válido, siempre que sus relatos sean coherentes y precisos.
Ejemplo práctico: Un colega que pueda confirmar que presenció insultos o actitudes despectivas hacia ti por parte de un superior.
Documentación escrita
Conserva correos electrónicos, mensajes de texto, informes o cualquier comunicación escrita que evidencie el acoso. Estas pruebas deben demostrar patrones de comportamiento hostil.
Consejo profesional: Guarda copias en un lugar seguro y organiza las pruebas por orden cronológico para facilitar su uso en un procedimiento judicial.
Registros audiovisuales
Aunque las grabaciones pueden ser una prueba válida si has participado en la conversación, deben respetarse las normativas de privacidad.
La Ley Orgánica 1/1982 protege el derecho a la intimidad, pero permite grabaciones cuando el propio afectado es parte de la conversación.
Informes médicos y psicológicos
El acoso laboral puede derivar en trastornos de ansiedad, depresión o problemas físicos relacionados con el estrés. Documentar estos daños con informes médicos o psicológicos es crucial para reforzar tu caso. La Ley de Prevención de Riesgos Laborales (Ley 31/1995) obliga a las empresas a garantizar la salud de los trabajadores.
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Desde tu primera consulta gratuita, escucharemos tu caso, lo evaluaremos a fondo y te guiaremos en cada paso acompañándote para que puedas defender tus derechos con total seguridad.

Pasos a seguir para demostrar el mobbing
Para defender tus derechos frente al acoso laboral, es fundamental actuar de manera organizada y conforme a la normativa legal.
Recopilación de evidencias
Agrupa y organiza todas las pruebas disponibles. Desde correos electrónicos hasta testimonios de testigos, todo lo que demuestre las conductas abusivas será clave para tu caso.
Notificación a la empresa
El siguiente paso es informar a la empresa de la situación. Según el artículo 24 de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, las empresas tienen la obligación de investigar y solucionar cualquier situación que pueda poner en riesgo la integridad del trabajador.
Notifica por escrito (preferiblemente mediante burofax) para dejar constancia formal.
Denuncia ante las autoridades competentes
Si la empresa no toma medidas, puedes acudir a la Inspección de Trabajo y Seguridad Social. Además, en situaciones graves, puedes interponer una demanda judicial para reclamar una indemnización o incluso la extinción de tu contrato con derecho a compensación (artículo 50 del Estatuto de los Trabajadores).
¿Qué hacer antes de recopilar las pruebas?
El acoso laboral no solo afecta a la persona que lo sufre, sino también a la calidad y el ambiente de trabajo en general. Si te encuentras en esta situación, actúa con firmeza y busca apoyo legal. Nuestro objetivo, como abogados especializados en derecho laboral, es proteger tu dignidad y tus derechos en el ámbito laboral.
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